En el viejo Barranco había una
calle tranquila llamada Nicolás de Piérola, lleva el nombre de un viejo rebelde
de la república, la avenida terminaba en otra avenida de mejor nombre llamada
San Martin; en invierno Barranco tenía sus calles llenas de hojas, muchas de estas hojas cayendo del cielo como
una lluvia en cámara lenta, era muy agradable caminar en medio de hojas caídas o
en medio de una garua; no recuerdo que edad tenia pero si recuerdo que no tenía
temor del tiempo ni del futuro; cerca de
este cruce un cine permitía a las familias de aquel entonces pasar un fin de
semana interesante, el cine de alfombra escarlata tenía el nombre de una marca
de cigarro que hoy ya no recuerdo, en ese cine vi Rocky IV y Quisiera ser
grande (Big). Probablemente las personas que leen este post ya recordaron quien
actuaba en la película y aparecerá en su memoria una de las escena más clásicas
del cine familiar de aquellos años.