Este Blog no es, ni pretende ser religioso, pero si expresa mucho el carácter de los que escribimos aquí, casi todo el mundo sabe del fallecimiento de mi padre, en momentos difíciles, cuando ya todos se han ido, cuando las luces se apagan este texto me ha servido mucho, para enfrentar esta parte de mi vida, gracias a todos mis amigos católicos y evangélicos por su apoyo, comparto con ustedes estas palabras.
Dicen que la depresión es el mal de estas ultimas décadas, que la tasa de suicidios aumentan año tras año, muchos dan soluciones, Coelho da tips acerca de auto superación, Miguel Ángel cornejo dice que de la noche a la mañana puedes crear una empresa y solucionar tus problemas económicos, curioso para alguien como Cornejo que nunca ha fundado una empresa.
Pero la tristeza es parte del ser humano, y también es una parte del ser divino, dicen que Dios se arrepintió de haber hecho al hombre debido nuestra maldad, y de allí vino el diluvio, le dolió a Dios, se sintió triste, hay otros casos como el de David, muchos de sus salmos son un grito de angustia, David llego al punto de desear estar muerto cuando murió Absalón su hijo, y que decir de Job, tan abrumado estuvo por tanta calamidad que maldijo el día en que nació, y donde dejamos a Samuel que lloraba al ver como Saúl fracasó como rey de Israel, Y Elías, que deseaba morirse debajo del enebro a pesar de que días antes había conseguido una gran victoria al arrasar con el culto pagano a baal, o Jeremías, que llego a decirle a Dios, “me sedujiste!!! Oh Dios”; y que llego a decir: “maldito el que le dijo a mi padre, un varón le ha nacido”.
Todos los grandes hombres de Dios y Dios mismo se han sentido algunas veces tristes, y que decir de Jesús, cuando en la cruz dijo: ¡Padre! ¿Por qué me has desamparado?, muchos tratan de maquillar la frase, pero en sí es una queja, no hace falta decir que Jesús en ese momento se sentía solo.
Para aquellos que se sienten solos, Dios trata de decirnos que él también paso por ello, así que no digamos ¡Dios no sabe de eso!, sí que lo sabe, pero afirmó su rostro para cumplir con el sacrificio de la cruz, o sonrió cuando vio que a pesar de que toda la tierra era un desastre había un hombre justo que se llamaba Noé.
La tristeza que quizás sentimos al ver nuestros sueños frustrados, o una enfermedad, o tantos motivos que uno tiene para sentirse deprimido, me hacen recordar unas palabras de David, en el salmo 38:9, que dice: “señor, delante de ti están todos mis deseos, y mi suspiro no te es oculto”.
Para todos aquellos que están tristes, deprimidos, o que están pensando en suicidarse, ¿por que no le cuentan el problema a Dios?, como lo hizo David; este mundo es muchas veces deprimente, cada día tengo mil razones para suicidarme pero una sola razón para no hacerlo, Dios es mi razón de vivir, y eso me basta.
1 comentario:
Miguel Ángel gracias por hacerme recordar quien es mi verdadero motivo de vivir y mi felicidad. AÑAY
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